
Entre el ruido y el sentido: cuando la ocupación devora la plenitud
Vivimos tiempos en los que estar ocupado es una virtud socialmente aplaudida. Decimos con orgullo que no tenemos tiempo, que estamos hasta arriba de tareas, que no paramos ni un minuto. Sin embargo, esta ocupación constante ¿es sinónimo de una vida plena? ¿O acaso corremos el riesgo de confundir actividad frenética con sentido vital? Este texto propone una reflexión filosófica sobre la diferencia entre una vida ocupada y una vida llena, explorando cómo el ritmo actual de productividad puede vaciarnos por dentro y cómo podemos recuperar el valor del ocio, la contemplación y la construcción de un propósito real. ...